Ingredientes

Para la base:

1 paquete de galletas oreo de 160 gr

50 gr de mantequilla derretida

Para el relleno:

250 gr queso philadelphia ( u otro queso fresco)

500 ml nata para montar

150 gr azúcar

2 sobres de cuajada Rozal (podemos sustituirlos por gelatina, crenetina en polvo u obleas)

300 ml de leche entera

1 paquete de galletas oreo de 160 gr 

Preparación

Para la base:

Comenzamos por separar la crema de las galletas y la reservamos. Trituramos las galletas del primer paquete que empleamos para realizar la base. 

Añadimos a las galletas trituradas la mantequilla derretida y mezclamos bien. 

Ponemos un papel vegetal sobre la base de nuestro molde. Este paso es muy importante para que la tarta no se nos pegue al molde. 

Colocamos la masa en nuestro molde. Para hacer este tipo de tarta es mucho mejor si el molde es desmontable. Presionamos con los dedos de forma que la base nos quede por todas partes igual de homogénea. 

Relleno:

Ponemos a calentar la nata liquida, 150 ml de leche el queso, el azúcar y la crema de las galletas que habíamos reservado. 

En un vaso diluimos la cuaja en el resto de leche, batiendo bien para deshacer los grumos. 

Una vez la mezcla comience a hervir, añadimos la leche con la cuajada, removemos y apartamos del fuego. 

Vertemos la mezcla en el molde que teníamos preparado, dejamos enfriar.

Añadimos la mitad de las galletas oreo que nos quedan en trozos, removemos y dejamos reposar.

 Cuando nuestra tarta esté fría llevamos al frigorífico y dejamos enfriar como mínimo 3 horas.  

Antes de servir adornamos con el resto de galletas oreo.

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